Me impresiona bastante. Algo que me dejaría con la boca abierta. Pero intento comportarme como un ser prácticamente normal que lo único que haría sería pasar del tema y hacer como que esto no influirá en su vida prácticamente nada. Que dentro de dos horas ya no se acordará ni del tema del que estamos tratando.
La gente cambia. Pero no es un cambio lento y pausado. Todos cambiamos con el tiempo, es cierto. Pero hay otro tipo de cambios para otro tipo de personas. Ese cambio rápido y directo. Tan rápido como el oír que se marchan rápidamente por el asfalto. Tan duro y frío.
Pasamos de compartir todo, de ser inseparables prácticamente. A miradas frías, a tener que ir detrás para que me perdonen la vida.
No sé si eso es lo que yo entendería por amigas. Así que en estos momentos solo me queda aguantar. Que son dos días. Y esta vez de verdad.
Dos días... parece mentira que realmente hoy acabe todo. Que el martes venga a recoger todas mis cosas y cierre esta habitación para siempre. Que este sitio vuelva a ser blanco y azul en vez de multicolor. Se cierra una etapa de mi vida. Algo extraña y extravagante que echaré de menos. Seguro.




