Mis manías de señora mayor.

Lo reconozco. Soy rara del copón. Por no decir otra palabra que alude directamente al aparato reproductor masculino.
Siempre me lo han dicho: "Eres rara y por tanto, te juntas con gente rara...". Que le vamos a hacer, la originalidad se paga caro y con creces.
Siempre he tenido mis manías, que creo que es a lo que la gente "normal" le sirve para calificar a otro ser de "raro". Pero no tiene porque llamarse raro o diferente a los demás, si no que esas cosas son las que hacen al otro especial y único en su especie. Lo puede hacer mejor o peor, pero lo hace inigualable entre todos los demás.
Muchas veces nos pasan un evento por el tuenti, te mandan un e-mail (que pocos leen...) de "Quien no ha tenido la tentación de cogerle las páginas amarillas a todos los vecinos y luego no la usas en todo el año?". O hacerte fan en el Facebook de "Yo también empiezo a apretar al botón de mi piso cuando oigo que viene algún vecino para no subirme con él en el ascensor".
Eso lo hacemos todos, nos reímos de ver que no somos únicos, que todo el mundo "ha tenido moratones que no saben de donde han salido" o "ha mirado dos veces la hora en el móvil porque la primera vez no no se ha fijado".
Pero yo llamo a los dos ascensores, me subo en el que primero viene y me quedo callada escuchando cuando se cierra el otro para ver cuantos pisos me he ahorrado, es decir si se cierra cuando voy por el 6º piso, pienso... oh... he ganado 18 segundos de mi vida! para que luego me encante cuando me acabo de despertar de la siesta y me quedo ahí en plan hasta que no me levante el tiempo seguro que no vuelve a correr...
Siempre que tengo que hacer algo para no llegar tarde me doy una cuenta atrás. Por ejemplo, si me tengo que ir a clase, me doy 20 segundos para levantarme... me tengo que levantar siempre antes de que termine!!!
Odio comprarme zapatos, lo veo demasiado absurdo, a nadie nunca le miro los pies... Voy mucho mejor con mis cómodas converse rojas que con un par de zapatitos de niña buena. Y si no fuera porque en las discotecas no me dejan entrar con zapatillas, date por seguro que iría con ellas.
Me encanta la fotografía y hacer(me) fotos, pero odio que me las haga otra persona, me da muchísima vergüenza.
Me gusta ir a pueblos perdidos del mundo para hacer fotos a los sitios y a sus gentes aunque nunca se como pedirlo...
Y también salir a la calle cuando llueve sin paraguas aunque luego coja un constipado horroroso.
Odio escuchar música de mi iPod con alguien, no lo soporto. La música que hay ahí es mía, y no me gusta que nadie sepa cual es.
Me gusta estar con mis amigas hablando horas y horas tomando algo por ahí (noche inclusive), pero no irme a una discoteca y aguantar solo para decir... he estado soportando esta música infernal hasta las 5 de la mañana!
Y hablando de música, prefiero escuchar a los grupos que el resto de mi generación no escucha o que directamente no sabe de su existencia. Las canciones que menos gente conoce son las que me hacen sentir que son más mías.
No me gusta nada el arroz caldoso, pero me encanta el arroz blanco, sin ningún añadido. Me dan asco las olivas, no las puedo ni tocar. De las empanadillas sólo me gusta el borde. En vez de palitos de anchoa o de sobrasada... propongo vender bordes de empanadilla ! Detesto la cebolla, y cuando la gente me pregunta: "Ala! Y entonces el tomate frito te lo comes sin cebolla? Y ... la ensalada? Qué haces?" Pues aunque parezca increíble ... puedes no ponerle cebolla al tomate!!!! A que es increíble???? Pues te lo digo yo, y la ensalada sin cebolla también se considera ensalada.. y sabes lo mejor de todo...?? Que está buena!!!
Me busco a gente rara, que le guste hacer cosas que no hace el resto de la gente, que me diga después de meses... vayámonos al fin del mundo. Que me hable del cielo plagado de nubes negras. Que no le importe pasarse el día hablando conmigo.
Me gustaría salir a la calle sin que nadie lo supiera, irme tan lejos como me permita el que nadie me eche aún de menos. Me gustaría volver allí. Ponerme a llorar por no haber vuelto antes. Ponerme unas gafas de sol y un pañuelo en el cuello. Llevar el pelo en la cara y que nadie supiera quien soy.
Adoro pasear por la playa cuando hace viento y puedo llevar una chaqueta, y más cuando estoy sola pero no puedo estar tomando el sol con miles de sombrillas que interrumpen lo bonita que es ella cuando no hay nadie.
No voy mucho a mi pueblo, hay veces que pongo mala cara cuando estoy allí incluso lo pago con la personita que más está pegada a mi... pero cuando voy con ella a dar vueltas por ahí, recuerdo que aún me queda algo por ver.
Las manos se me arrugan en cuanto tocan el agua. Nunca llevo anillos ni relojes porque me molestan, pero me paso el día mirando la hora.
Siempre que me enrollo un mechón del pelo entre los dedos es porque estoy concentrada, tengo sueño o estoy aburrida.
Tengo una esclava que al venirme grande no puedo evitar pasarme el dia sacándola del sitio, mis amigas siempre me han dicho que la perderé algún día... llevan diciendomelo desde 1º de la ESO.
Salir al balcón cuando está a punto de llover, cuando está anocheciendo o amaneciendo, oír como los coches vienen y van... oír que el mundo nunca se va a parar.